Carta abierta

Hoy me fui a una universidad «X» y vi la materia de Lengua y Literatura, pregunté acerca de ella y me dijeron.

«Esa carrera no la estamos ofertando porque no hay personas que la quieran aprender» 

Con tristeza me he regresado a casa, soy estudiante de leyes (una cátedra que detesto) el motivo: en ese tiempo que empecé con el pre universitario, mis padres eran quienes pagaban y aparte de todo soy una persona con discapacidad y en total era un títere (era).

Desde que tengo uso de razón me fascina la lectura, como carrera (si es que hay trabajo como lectora) y c
omo placer. El primer libro que leí fue “María”,  el segundo “El principito”, el tercero “El misterioso caso de Pale Horse”, el cuarto “Madame Bovary”, el quinto “Historia de dos ciudades”, el sexto “La Metamorfosis”… y de ahí no recuerdo el orden de mis lecturas porque por un tiempo lo dejé, estaba ocupadísima con el tema del colegio, los grados..etc… Luego en la universidad retomé los libros, (no fueron de mi gusto) Código civil, Constitución, Historia del derecho…hasta que en la clase de lenguaje me mandaron a leer «Los jefes y los Cachorros» de Vargas Llosa, y desde ahí no pude parar de leer.

Me gusta la literatura porque aumenta la capacidad de expresarse mejor y de no cometer horrores ortográficos. Hace poco leí: «Leer es el hobby más peligroso del mundo»  y sí, lo es; dejar llenarse de ideas, adquirir conocimientos, los pensamientos se convierten en emociones. La lectura nos obliga a aceptar, olvidar y reflexionar.

En la mayoría de los países Latinoamericanos la literatura *no te da de comer*, pero da una satisfacción personal que llena internamente. Para mí es emocionante vivir cada libro que leo. Ser un personaje diferente con cada relato.

****¿Otros motivos?

Aprender de otros Una de las lecciones de mayor importancia la encontramos en la literatura.

Profundizar en otras creencias La literatura, nos admite tener estilos en otras creencias, algo que nace desde el fondo del corazón de alguien, algo que nos ilumina por el tiempo que queramos ser iluminados.

Para amar y entender  a las personas que son diferentes a nosotros Cada persona es un mundo; un mundo lleno de creencias, de hábitos, de costumbres, de sentimientos, expresiones y emociones, al leer nos topamos con personas que son diferentes a nosotros. La literatura nos ayuda a entenderlos un poco más aunque rechacemos sus opiniones o ideas.

La literatura nos enseña que no estamos solos  Para mí la lectura es una ayuda de  reflexión interior. A veces reflejamos nuestros actos y personalidades con algún personaje de la literatura. (Aunque en muchas ocasiones es doloroso) nos abre los ojos. Si en el caso de que un personaje parecido a nosotros sufre algún problema cualquiera que sea y lo supera, nos ayudará a pensar que nosotros también podemos superar esos problemas en nuestras vidas.

Vivo lo maravilloso de lo acostumbrado  La literatura nos muestra la importancia de los actos humildes de las personas y esto nos ayuda a tener esperanza y confianza en que todo nos saldrá bien.

Por ahora; la literatura es mi camino a elegir. Aprender más. Entender. Profundizar. Y luego de ser abogada, quiero optar por lo que me apasiona. Ya no soy un títere.